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EL LOBO SAPIENS
Actualidad Social


Mientras que la tremenda crisis que tenemos encima nos hace sacar lo mejor de la esencia del ser humano, es inevitable que también aparezcan aquellos aspectos que formas parte de nuestras sombras.

En cada uno siempre existe esa sabiduría que nos hace considerarnos como seres inteligentes y que, según parece, nos diferencia de los animales y la otra parte que llamamos primaria y que nos conecta con aquellos aspectos de nuestra evolución mas relacionada con los instintos y la pura supervivencia. Biológicamente llamamos evolución a todo aquello que, a través de miles de años nos ha hecho como somos ahora.

Esta etapa que vivimos puede ser un salto en la evolución, según las teorías darwinistas los cambios suponen una selección y adaptación a los fenómenos que nos rodean. Puede ser que predominen aquellos valores que podemos definir como mas elevados, el cultivo de la compasión y la disponibilidad para acompañar y aliviar el sufrimiento de otros. Quizás haya un salto en la experiencia de la espiritualidad como expresión del anhelo de las personas en contacto con la naturaleza, el universo, el amor…Puede que, si hemos aprendido, la persona social que somos viva de forma altruista, solidaria, respetuosa, desinteresada y consciente de nuestra autenticidad y relación indisoluble con el otro y los otros.

También puede ocurrir que en este salto en la evolución se consoliden, sin jerarquizar, la fusión de lo primario con la inteligencia, y que lo que triunfe sea el lobo sapiens, una criatura sin los valores que antes hemos referido y que ponga al servicio de lo primario la sublime inteligencia que se nos ha regalado. El riesgo tremendo de esa criatura es que puede utilizar esa capacidad para convertirnos en su alimento, que se apropie de cualquier territorio, que destruya por sentir el poder.
Nuestro mundo puede reconocer a estos seres, compartimos espacio y tiempo. Parece difícil que se puedan transformar sin competir con ellos, sin utilizar su mismo lenguaje, sin hacerlo desde la lucha.

La fuerza para que el cambio se oriente hacía la opción basada en la igualdad está en la toma de conciencia, el reconocimiento de la esencia espiritual que somos y la confianza e impecabilidad de nuestras acciones. Todo esto no es algo teórico y lejano a la práctica de lo cotidiano. Es tan sencillo como dotar a cada cosa que hacemos de una intención clara, consciente y plena. Podemos freír un huevo con consciencia, conducir, escribir o realizar cualquier acción. Si somos conscientes, seremos responsables, creativos, independientes y respetuosos. El lobo sapiens carece de esas cualidades ya que solo ve a los demás o a lo demás como alimento, ya sea del ego, del bolsillo o del poder. Eso también lo hace débil. Ya que siempre vivirá con miedo a otro lobo, vivirá defendiéndose y consumiendo su energía en una lucha que al final lo puede destruir. Necesitamos paciencia, presencia y perseverancia para que la evolución siga su camino ascendente. Depende de cada uno de nosotros.

Vicente Arráez